An american tail (Fievel y el Nuevo Mundo) es una de mis bandas sonoras favoritas. Como tantas otras, esta afinidad tiene razones personales debidas a recuerdos ya lejanos, y razones más objetivas debidas a la calidad artística del score.
Hoy en día el cine de animación ha dado, salvo excepciones como The princess and the frog, un giro de 180 grados. Las tres dimensiones parecen haberse impuesto en la gran pantalla, aunque, hay que reconocerlo, su éxito ha impulsado su desarrollo y todos los años se estrenan muchas más películas que en la época en la que Disney copaba el mercado.
En el caso de An american tail, producción de Steven Spielberg que fue uno de los primerizos intentos en demostrar que la factoría Disney no era la única en el juego, nos encontramos ante una magnífica historia desarrollada de manera impecable y que se beneficiaba enormemente de la maravillosa partitura de James Horner. El músico californiano da lo mejor de sí mismo en el género, y prueba de ello son sus obras maestras Fievel goes west (la segunda parte de la citada), The land before time o The Pagemaster. Para An american tail se sirvió de su estilo clasicista alejado de grandilocuencias superficiales y de las canciones compuestas a dos manos con Barry Mann, modelos de función dramática dentro de la historia del filme.
Orquestador: Greig McRitchie.
0 comentarios:
Publicar un comentario